La crisis de vivienda en EE. UU. alcanza niveles históricos con una escasez de entre seis y siete millones de viviendas, un aumento alarmante desde los 2.5 millones en 2018. En 1970, se construían 418,000 viviendas de entrada cada año, pero hoy apenas se construyen 55,000, a pesar de que la población ha crecido de 200 millones a 340 millones. ¿Cómo llegamos aquí? Analicemos los datos detrás de la crisis que afecta a la generación millennial y a millones de estadounidenses en busca de su primera casa.

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